Los 3 tipos de
comunicación interna

3 tipos de comunicación interna: ascendente, descendente e interfuncional

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La comunicación interna se refiere a todas las acciones de comunicación dentro de una empresa. Su objetivo es facilitar el intercambio de información (resultados, decisiones importantes, acontecimientos diversos), especialmente entre la dirección y los empleados. Según un estudio del Observatorio de la Vida Laboral, alrededor del 25% de los empleados consideran que la comunicación interna es insuficiente en su empresa.

Sin embargo, este estudio también mostró que los empleados consideran la comunicación interna como un factor esencial para su bienestar y motivación en el trabajo. De ahí la importancia, como organización, de considerar seriamente esta cuestión. Así pues, en este artículo veremos cuáles son los tres principales tipos de comunicación interna, así como su función y objetivos, acompañados de una lista de buenas prácticas a aplicar.

Comunicación ascendente

La comunicación ascendente es un tipo de comunicación en el que la información compartida procede de los empleados. Es, por tanto, lo contrario de lo que tradicionalmente se observa en las empresas, donde la información se difunde de la dirección a los empleados.

Este modo de comunicación se caracteriza por su fluidez y apertura. Permite a los empleados participar en la estrategia de la empresa y proponer libremente sus ideas, estableciendo así una forma de democracia participativa dentro de la organización. Como tal, es una herramienta ideal para promover la innovación en la empresa. Sin embargo, para que este sistema funcione, hay que establecer un marco estricto.

Buenas prácticas

Las buenas prácticas de comunicación ascendente se basan en varios principios clave.

En primer lugar, debe ser periódica y coherente con la estrategia de la empresa, con mensajes claros y concisos para evitar cualquier pérdida de información.

En segundo lugar, es importante que los líderes sean accesibles y abiertos, fomentando así el diálogo abierto y una cultura de transparencia.

Por último, el uso de diversos canales de comunicación adaptados al público destinatario (buzones de sugerencias, reuniones, grupos de debate, etc.) garantiza la difusión eficaz de los mensajes.

Herramientas de comunicación ascendente

Buzones de sugerencias
Cuestionarios y encuestas
Reuniones
Correos electrónicos
Digital Workplace:

Comunicación descendente

La comunicación descendente es el tipo más común de comunicación interna. Consiste en transmitir información desde la dirección de la empresa a los empleados (de ahí su nombre: la información "desciende" hasta los colaboradores). La comunicación descendente se basa en un sistema jerárquico en el que la dirección toma decisiones y luego las comunica a los empleados.

Aunque sigue estando muy presente en las empresas, cada vez cede más terreno a otras formas de comunicación. De hecho, a menudo se critica la comunicación descendente por su rigidez, aunque también sirva para establecer un marco y garantizar la correcta difusión entre los empleados de los proyectos y objetivos a perseguir.

Buenas prácticas

Una comunicación descendente eficaz debe reflejar los valores y el ADN de la empresa. Por ejemplo, es aconsejable evitar el uso de anglicismos y lenguaje "joven" cuando se trata de una gran empresa tradicional. Esto sólo causaría confusión entre los empleados. Así pues, es importante recordar que una buena comunicación descendente debe ser coherente para fomentar el sentimiento de pertenencia entre los colaboradores.

Del mismo modo, los mensajes difundidos deben ser lo más claros posible, y los canales de comunicación lo suficientemente variados como para llegar al mayor número posible de empleados: el soporte escrito es obviamente importante, pero la comunicación oral también debe formar parte de la estrategia de comunicación de la empresa.

También puede establecerse una cultura de retroalimentación, que demuestre a los equipos que sus opiniones son importantes y se tienen en cuenta.

Herramientas para la comunicación descendente

Expositores, siempre que estén estratégicamente situados
Lugares de trabajo digitales
Boletines de empresa
Redes sociales internas
Mensajería instantánea
Reuniones de equipo, que se celebrarán periódicamente

Convierta su intranet en un lugar de trabajo digital

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Comunicación interfuncional

También conocida como comunicación horizontal, la comunicación interfuncional consiste en facilitar los intercambios entre todos los miembros de una empresa, independientemente de su nivel jerárquico.

Cuando se utiliza adecuadamente, la comunicación interfuncional fomenta el trabajo en equipo y el intercambio de información entre los empleados. También contribuye a reforzar la cultura de la empresa al crear un sentimiento de unidad y compromiso con un objetivo común. En otras palabras, es una forma excelente de fomentar la colaboración entre equipos.

Sin embargo, hay que tener cuidado con las trampas de este tipo de comunicación, que a veces puede ser demasiado omnipresente. Es importante equilibrarla para que los empleados puedan centrarse en su actividad principal, evitando pasar demasiado tiempo en reuniones, por ejemplo.

Buenas prácticas

Hay que ser prudente con este tipo de comunicación, que, si se implanta demasiado deprisa o fuera de un marco bien definido, puede debilitar una organización en lugar de mejorarla. En primer lugar, es importante establecer puentes sólidos entre los distintos niveles jerárquicos. Esto garantiza que la comunicación interfuncional se integre bien en el funcionamiento tradicional de la empresa. Además, hay que evitar proponer intercambios demasiado frecuentes o largos, que podrían impedir compartir la información.

En segundo lugar, es necesario formar a los empleados en la comunicación interfuncional, que a veces puede resultar desconcertante. Aclarando las misiones de cada uno y dando explicaciones claras sobre el funcionamiento de este tipo de comunicación, los empleados podrán adoptarla rápida y fácilmente.

Por último, las empresas deben tener en cuenta que es mejor evitar implantar un modo de comunicación interfuncional si no corresponde a su sector de actividad. A pesar de sus ventajas, este tipo de comunicación no es aplicable a todas las organizaciones. Así, es preferible un medio de comunicación tradicional que funcione bien a un modo de comunicación más moderno pero menos coherente con el modelo de empresa.

Herramientas de comunicación interfuncional

Reuniones (físicas o a distancia)
Tiempos de intercambio informal
Grupos de debate
Plataformas de comunicación, preferiblemente una única herramienta centralizada.

Conclusión

La comunicación interna es una herramienta esencial para las organizaciones. Hoy en día, ¡es incuestionable prescindir de ella! En efecto, contribuye a reforzar la cultura de la empresa, a facilitar el intercambio de información y a mejorar la colaboración entre los equipos. Sin embargo, cuidado, aunque todos los tipos de comunicación interna tienen sus ventajas, no todos son adecuados.

De hecho, antes de elegir, es importante tener en cuenta las especificidades de la empresa. Por ejemplo, los tipos de comunicación ascendente o interfuncional no son transferibles a todas las organizaciones....

Por último, hay que tener en cuenta que las formas tradicionales de comunicación interna (conocidas como "descendentes") no tienen por qué evitarse necesariamente, siempre que se inscriban en un marco claro y se rijan por normas coherentes. Además, nada impide mezclar distintos tipos de comunicación interna, en función de las peculiaridades de la empresa.

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